Cómo será el festival con las máximas leyendas del rock

Luego de que el sol se ponga y el suelo se vuelva púrpura sobre el Empire Polo Club del Indio Valley el 7 de octubre, Bob Dylan tomará el escenario. Lo seguirán los Rolling Stones y será la primera fecha de un evento histórico de tres días que incluirá también a Neil Young, Paul McCartney, The Who y Roger Waters: dos bandas por jornada haciendo sus shows completos, con sus propias superproducciones. El evento -que es el resultado de un año de reuniones secretas y cuidadosas negociaciones- no tiene un nombre. «¿Qué nombre puede ser más fuerte que estas bandas?», dice Paul Tollett, el CEO de Goldenvoice, que armó el evento.

Durante los últimos 17 años, Tollett ha montado el Coachella Music & Arts Festival, también realizado en Indio, California, evento que forjó su reputación con las grandes reuniones de Pixies, Rage Against the Machine y Guns N’Roses. Cuando la ciudad de Indio otorgó el permiso para el festival de octubre, Tollett quería superarse a sí mismo. «La temática era bandas de rock que han tocado consistentemente desde los primeros días», dice. «Somos los sobrevivientes más grandes de nuestra era. Me alegra que lo hayamos logrado», agrega Roger Daltrey de The Who.

Dos años atrás, Tollett armó una lista que incluía sólo a las seis bandas. Viajó a ver a cada una, y lentamente les vendió la idea. «Si hacía una oferta financiera de entrada, me hubieran rechazado», explica. «Los Stones preguntaron en qué estaba trabajando. Yo dije: ‘Estoy trabajando en uno de los shows más grandes de todos los tiempos. No sé lo que significa, pero los voy a llamar'». Uno de los desafíos más grandes fue lograr que firmara la primera banda. (Tollett no quiere decir cuál es.) «Un par dijeron: ‘¿Qué vas a hacer si no lo hacemos?’. Y respondí: ‘Si no conseguimos a estos seis, no vamos a hacer el show’. Ellos dijeron: ‘Ok, eso es bastante interesante’.» El único con el que Tollett no se reunió personalmente es Dylan: «Vivo cerca de él, pero no es el tipo de persona que te encontrás en la tienda de la esquina». Se dice que las bandas recibirán hasta 7 millones de dólares por show. «Todos tendrán lo que valen», dice Tollett.

Mientras que Coachella tiene un campo de pie, un «mini estadio» está siendo construido para el evento de octubre, con un pit frontal, asientos y un área de entrada general atrás. Los pases para los tres días van desde 399 a 1.599 dólares, sin incluir los paquetes VIP (los tickets para una fecha se venden a 199 dólares). Es caro, pero Tollett señala que no está tan lejos de los precios de Coachella. A pesar de los nombres, queda la duda si el formato festival será atractivo para los baby-boomers: «Todo concierto es un riesgo. Definitivamente me tuvo sin dormir. Cuando lanzamos Coachella, sabíamos cuál iba a ser la audiencia. En este caso es un enigma». Scooter Weintraub, manager de Gary Clark Jr. y Sheryl Crow, agrega: «No puedo imaginarme que no le vaya a ir bien a esto. Es un dream-team».

Para Tollett, el concierto es el pico de una carrera que comenzó cuando dejó la universidad para organizar shows de bandas punk, a principios de los 80. Desde entonces ha convertido Goldenvoice en un imperio: Coachella generó más de 84 millones de dólares en 2015. Parte del año, Tollett vive en una casa en el lugar del festival con sus empleados, y trabaja duro en los detalles hasta tarde, en reuniones sobre mesas de picnic. «Tenía grandes sueños en el comienzo, pero nada ni siquiera cercano a esto», dice. «Es difícil de comprender.»

ROLLING STONE ARGENTINA