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El fútbol argentino nos sigue regalando emociones, y esta vez fue Atlético Tucumán quien protagonizó una noche de contrastes en tierras santiagueñas. En un enfrentamiento de alta tensión contra Central Córdoba de Santiago del Estero, el equipo tucumano logró imponerse con determinación y profundizó la crisis del conjunto local. El partido estuvo lleno de contingencias que lo desvirtuaron, pero eso no opacó el desempeño del Decano, que se llevó un triunfo valioso y vibrante.
El primer tiempo se vio afectado por graves incidentes entre las hinchadas de ambos equipos, lo que obligó a detener el encuentro durante 28 minutos. Esta interrupción afectó el ritmo del juego, y tanto Atlético Tucumán como Central Córdoba tuvieron dificultades para recuperarse. El partido transcurrió en un ritmo lento, pero con algunas ocasiones de peligro para ambos lados. El arquero Marchiori demostró sus reflejos ante un peligroso disparo de Pereyra, mientras que el Decano también generó oportunidades con un remate de media distancia de Sánchez y un centro peligroso de Tesuri que no pudo ser capitalizado por Estigarribia.
En la segunda mitad, el partido tuvo un giro significativo cuando Kociubinski, aprovechando una pelota parada, abrió el marcador para Atlético Tucumán. A partir de ese momento, la tensión en el estadio se volvió palpable, y los incidentes y desórdenes en las tribunas se trasladaron al campo de juego. Central Córdoba cayó preso del nerviosismo y perdió el orden, lo que fue aprovechado por el Decano para aumentar la ventaja. Menéndez selló el segundo gol para poner fin a una noche intensa y polémica.
El equipo tucumano ha cerrado su participación en la Liga Profesional con una racha impresionante de seis partidos sin perder, sumando cinco victorias y un empate. Por otro lado, Central Córdoba ha sufrido una serie de derrotas en sus últimos cuatro encuentros, lo que ha generado una atmosfera tensa e incendiaria en su estadio.
En resumen, el encuentro entre Atlético Tucumán y Central Córdoba fue una montaña rusa de emociones, marcada por los incidentes fuera y dentro del campo de juego. El Decano logró mantenerse firme en medio del caos y obtuvo una victoria que reafirma su buen momento en el torneo. Mientras tanto, Central Córdoba atraviesa una crisis deportiva que demandará esfuerzo y trabajo para revertir. El fútbol argentino siempre nos sorprende, y esta vez, los protagonistas fueron los equipos tucumanos, que se impusieron con garra y pasión en una jornada para el recuerdo.